Tras una semana en la que el calor sofocante y la calima han cubierto la isla, hoy ha amanecido nublado. Los vientos alisios traen el frescor del océano y algunas nubes, que van cubriendo la ciudad durante la mañana.
A mediodía comienza a llover. Un inesperado aguacero, que provoca ese inconfundible aroma...
Olor a lluvia,
de la espina del cactus
pende una gota.
Cuando el chubasco cesa, el paisaje se ve con esa claridad que deja la lluvia a su paso. Después de tantos días, el aire es limpio y, al fin, vuelvo a ver el mar desde mi ventana.
Tarde de julio,
sólo el cielo azul
y la luna...
Gracias por compartir esos momentos Leti _/\_
ResponderEliminarBonitos haikus.
Abrazos!
Muchas gracias Gorka. Lo enriquecedor es poder compartir estos momentos.
EliminarBuen fin de semana, un abrazo.
Una maravilla Leti, un haibun perfecto con perfectos y preciosos haikus, mis felicitaciones amiga
ResponderEliminarMuchos besos
Me mimas demasiado Xaro:-) Me alegra de corazón que te haya gustado, muchísimas gracias.
EliminarMuchos besos para ti también.
Como todo buen haibun: además de esa frescura del texto, la presencia de los dos haikus con vida propia. Una hermosa conjunción.
ResponderEliminarGracias, Leti.
Un beso.
Gracias querido amigo. Es lindo transmitir una vivencia y llegar a otras personas...
EliminarUn gran abrazo.