Hattori
Ransetsu (1654-1707) fue un poeta japonés y una figura clave en el
desarrollo del haiku durante el periodo Edo. Se le conoce
sobre todo por ser uno de los discípulos de Matsuo Bashō y por su
contribución al refinamiento del haiku.
Los haikus de
Ransetsu se centraban en el mundo natural, explorando su belleza e
impermanencia. Sus obras se caracterizan por la sencillez, la
observación aguda y la calidad meditativa. Aunque no alcanzó la
misma fama que Bashō, fue muy apreciado por su estilo único y su
influencia en los poetas de haiku posteriores.
También era
conocido por sus habilidades en caligrafía y pintura, lo que le
convertía en un artista polifacético de la época. Su legado en la
poesía japonesa es significativo, especialmente en el contexto del
haiku, y sigue siendo una figura importante en el estudio de la
literatura japonesa moderna temprana.
ah... una mujer
que no puede tener hijos
cuida de una muñeca
luna de otoño -
el vapor se desliza sobre el agua
brillando
En el ciruelo
una flor, una flor que da
calor
Los
grillos en los pinos,
ni un solo «cri-cri».
Negro cuenco de té.
Noche helada,
la luna se oculta tras
las ramas de pino.
El viento pasa,
y un pétalo se cae
sobre el agua quieta.
La lluvia cae,
y el sonido de la hoja
se pierde en la nada.
Al alba,
el aroma del brote nuevo
envuelve mi alma.
El eco del
paso
en la calle vacía,
solo un cuervo grita.
En el horizonte,
el cielo y el mar se funden
la barca se pierde.
Bajo la luna,
el bambú se mueve lento;
el viento susurra.
Un solo
suspiro
entre las hojas secas,
la tarde se apaga.
En el estanque
quieto,
la flor de loto se abre
como un sueño puro.
Al borde del
agua,
la luna en su reflejo
nunca se queda.
En el campo vacío
solo el canto lejano
de una cigarra
El viento de otoño
mueve la persiana de bambú
también mi corazón.
El río fluye
pero su canto se pierde
entre las piedras.
una gota de rocío.
Al caer el sol
el viento de verano
acaricia la piel.
el rastro que dejó ayer
una bandada de gansos.
una última hebra
de mi cabello fino.
las olas suaves
llegan a la arena.
una sola danza
en las olas del río.
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